BOGOTÁ, sep 6/11.- En compañía de un grupo de personas con discapacidad, el candidato a la Alcaldía de Bogotá David Luna, recorrió algunas calles y avenidas de la ciudad sobre una silla de ruedas, para demostrar que la capital no es una ciudad amigable, ni dispuesta para que más de 800 mil personas que padecen alguna limitación física puedan desarrollar una vida normal.“Encontramos que las rampas para estas personas en muchas partes no existen, en otros están más arriba de lo que su capacidad les permite subir y para completar, las alcantarillas sobre algunas de las rampas hacen imposible la movilidad de estas personas”, denunció David Luna.En el sistema de transporte público la cosa es igualmente crítica. “Transmilenio no cuenta con los sistemas de ascenso y descenso requeridos para estas personas, ni en todas las estaciones existen puntos de acceso especiales para ellos”, agregó Luna.
En el recorrido por la carrera 15 y la Avenida 30, Luna estuvo acompañado por el candidato al Concejo de Bogotá Armando Escobar, un líder liberal que padece una discapacidad y que quiere llegar al cabildo para trabajar por los miles de bogotanos con limitaciones físicas.
«Bogotá no es apta para discapacitados. El diseño de la ciudad, la gente y las políticas son totalmente ajenas a la situación de personas con limitaciones», aseguró Escobar.
Las dificultades de la población con discapacidadEn el tema de educación, la Encuesta de Calidad den Vida de Bogotá 2007 reveló que 46.848 menores con discapacidad no asisten a clases.El tema para las personas invidentes la situación no es más alentadora. Las calles son difíciles para su desplazamiento y la señalización no está adaptada para quién no pueda ver. La falta de conectividad entre troncales, falta de uso de algunas líneas, invasión de vendedores informales, gente caminando por las rutas y agresividad del tránsito contra los ciclistas son algunas de las quejas comunes, que se evidencian en las campañas de movilidad que promueven instituciones como la Universidad Nacional de Colombia. En su recorrido, Luna hizo una propuesta para aliviar la difícil situación de estas personas que deben luchar también, con la indiferencia de mucha gente: “Bogotá sin obstáculos”, la propuesta de Luna , consiste en tres aspectos:
1. Obligar a contratistructores viales a incorporar, obligatoriamente, todas las disposiciones urbanísticas y que rigen a nivel mundial, para facilitar la movilidad de las personas en discapacidad.
2. Promover, por parte de la personería y la procuraduría, a TransMilenio y a las empresas de transporte pùblico que no garantizan el derecho a la movilidad de la población en discapacidad y,
3.Incluir, en la puesta en marcha del SITP, requisitos para el funcionamiento incluyente del transporte publico frente a las personas en discapacidad motriz y visual.
